La colocación de una puerta acorazada es, sin duda, una de las mejores decisiones que podemos tomar para proteger el interior de nuestra vivienda o negocio de las intrusiones externas. A la hora de decidirnos por una puerta acorazada es importante que tengamos en cuenta sus características técnicas de seguridad y que disponga de un certificado que las acredite.

Además de ello, debemos tener presente que la puerta de entrada es la carta de presentación de nuestra casa o negocio, por lo que no podemos descuidar su función decorativa. Si la oficina o vivienda está ubicada en una urbanización o edificio, puede ser la comunidad de vecinos la que determine los parámetros estéticos que debe de seguir. De lo contrario, tendremos más libertad a la hora de elegir el color, los materiales y el diseño.

 ¿Cómo debe de ser nuestra puerta acorazada?

Las puertas acorazadas tienen una estructura de acero y tanto su hoja como el cerco (la parte que va fijada a la pared) están fabricadas de este material en distintos espesores.

Además, disponen de cerraduras de seguridad, de manera que, al cerrar la puerta con llave se despliegan unos bulones o piezas cilíndricas que anclan la hoja con el cerco y que pueden ser de diferentes longitudes y diámetros.  Existen distintos tipos de cerraduras: antipánico, dobles, de cilindro, electrónicas, de borjas o eléctricas y, para elegir la más adecuada, es importante que tengamos en cuenta nuestras necesidades específicas y atendamos al consejo experto del fabricante.

Las puertas de entrada están catalogadas con distintos grados de seguridad  según los resultados obtenidos en los ensayos llevados por laboratorios independientes para establecer su resistencia ante un hipotético robo. A partir del grado tres podemos empezar a hablar de puerta de seguridad. Por ejemplo, para una vivienda o negocio ubicada en un edificio con tránsito de vecinos o vigilancia las más oportunas son de grado 4, mientras que para las viviendas aisladas o los negocios con riesgo elevado de robo, como por ejemplo joyerías, son aconsejables las de grado 5.

A la hora de decidirnos por una puerta acorazada es importante que confiemos en fabricantes de calidad y que comprobemos que está certificada en normativas ampliamente aceptadas, como AENOR (normas UNE-EN 1627:2011 y UNE 8516:2013).

La estética de las puertas acorazadas

Una vez verificado que nuestra puerta acorazada cumple con los requisitos de seguridad que necesitamos, llega la hora de elegir su acabado: color, material y diseño. La seguridad no tiene porqué estar reñida con la estética, así que te proponemos una variedad de modelos que conjugan magistralmente ambos aspectos.

Las puertas acorazadas pueden estar revestidas por paneles de diferentes materiales como madera, PVC, melamina etc.. así que es importante optar por el más adecuado teniendo en cuenta si la puerta va a estar expuesta a la intemperie o no. Uno de los materiales más resistentes para exteriores son las puertas con paneles de aluminio pintados al horno, que podemos elegir en color blanco o imitación a madera.

Puertas con anexos o montantes  cristal. Son aquellas que llevan un cristal fijo de seguridad en uno o los dos laterales y, opcionalmente, también pueden llevar un montante sobre la puerta en forma de arco o rectángulo. Según el gusto del cliente pueden tener o no reja. Estos modelos son visualmente muy atractivos y permiten el paso de la luz exterior.

Puertas acorazadas con cristal en la hoja. En este caso, el cristal debe de ser de blindado y se colocará de tal manera que no estorbe a los dispositivos de seguridad de la puerta. Se puede optar por poner una reja en la parte interior del cristal.

Puertas acorazadas de doble hoja. Compuestas, como indica su nombre, de dos hojas móviles de igual o diferente tamaño, permiten una mayor amplitud de acceso.

Puertas de diseño. Son aquellas creadas concretamente para satisfacer los gustos estéticos del cliente. Este tipo de puertas se adaptan, tanto en su medida como en diseño, a los requerimientos específicos de cada proyecto, sin perder de vista la seguridad.

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